Personas mayores y fisioterapia
Partiendo de la base de que envejecer es siempre complicado, desde la fisioterapia tenemos mucho que aportar a un proceso largo de pérdidas en cuanto a las capacidades de cada persona, en el que sin embargo, la forma en la que vayamos a aceptar los cambios, nos va a permitir mantener una actividad diaria y una calidad de vida independiente el mayor tiempo posible.
Hemos de ser conscientes de que los objetivos de cada individuo son distintos y van cambiando respecto a las épocas de la vida en la que nos encontramos. No vamos a conseguir nada si nos peleamos contra el envejecimiento en si, el proceso es el que es y pelear con uñas y dientes contra ello seguramente nos llevará a la frustración, tanto a los profesionales como a las personas mayores. Sin embargo, si modificamos los objetivos y las expectativas de la persona mayor, podremos engancharla a su propia calidad de vida.
La comunicación fisio paciente debe ser fluida y hemos de ser capaces de llegar a conectar con los pacientes, nuestros objetivos no tienen porque ser los suyos, no vivimos en su piel, ni tenemos sus preocupaciones ni anhelos.
Partiendo de esa base, seamos acompañantes en el proceso de empoderamiento de la persona, no tratemos de “salvarles la vida” sino de acompañarles en el proceso de vuelta a recuperar las riendas de su vida.
Tenemos claro que vamos a la peluquería a que nos tiñan y corten el pelo, que nos dejen guapos, pero al mismo tiempo sabemos que si hasta la próxima visita, nosotros mismos no lavamos y peinamos el pelo, no seremos capaces de mantenerlo. Desde mi punto de vista, mi día a día es igual, acompaño a los pacientes cada vez que vienen a verme y les invito a que entre las visitas sean ellas mismas las que se encarguen de realizar el mantenimiento, una vida activa y trabajar día a día en las pequeñas o grandes cosas que podemos hacer nosotros mismos, de forma que el objetivo sea que necesiten acudir a verme cada vez más espaciado y sobre todo, la calidad de vida entre cada una de esas visitas sea la óptima para cada persona, circunstancia y estado.
Todos tenemos la capacidad de coger las riendas de nuestra vida y hacer de ella una mejor o al menos más independiente, aprovechémosla y trabajemos en equipo para conseguirlo.